Procesos optimizados: Los procesos existentes se optimizan correctamente debido al flujo adecuado de datos entre departamentos.
Consistencia de los datos: los procesos optimizados dan como resultado la consistencia de los datos en toda la organización, ya que está centralizada. No es necesario que cada departamento almacene datos por separado.
Mejoras en la productividad: La consistencia de los datos elimina la carga del trabajo impertinente del personal y los gerentes. Esto les ayuda a concentrarse en sus tareas principales y por lo tanto, mejora la productividad.
Un sola fuente de la verdad: La base de datos centralizada garantiza que el pedido del cliente no necesite almacenarse en departamentos separados de forma redundante. Una identificación única generada por cliente o por pedido, ayuda a varios departamentos a acceder a los mismos datos.
Mayor transparencia: Manejar todos los procesos de manera sistemática dentro del ERP, no sólo ayuda en la optimización de procesos, sino también, esto da como resultado la transparencia en toda la organización y ayuda al plan individual del administrador de procesos por adelantado.